Japón está preparando una normativa que obligaría a gigantes tecnológicos como Apple y Google a permitir tiendas de aplicaciones y pagos externos en sus sistemas operativos móviles, según ha podido saber Nikkei, en un intento de frenar el abuso de su posición dominante en el mercado japonés.

La legislación, que se enviará al Parlamento en 2024, restringiría las maniobras de los operadores de plataformas para mantener a los usuarios en sus propios ecosistemas y dejar fuera a sus rivales, centrándose principalmente en cuatro áreas: tiendas de aplicaciones y pagos, búsquedas, navegadores y sistemas operativos.

El plan consiste en permitir que la Comisión de Comercio Justo de Japón imponga multas en caso de infracción. Si se sigue el modelo de la legislación antimonopolio vigente, las sanciones ascenderían en general a alrededor del 6% de los ingresos obtenidos con las actividades problemáticas. Los detalles se concretarán esta primavera.

El Gobierno determinará a qué empresas se aplica la legislación, basándose en criterios como las ventas y el número de usuarios. Se espera que afecte principalmente a los gigantes multinacionales, sin que las empresas japonesas queden atrapadas en la red.

Apple no permite que se descarguen aplicaciones en los iPhones a través de canales distintos de su propia App Store. Los pagos dentro de las aplicaciones también pasan por el sistema de Apple, que se lleva una tajada de hasta el 30%, y aunque Google permite plataformas de distribución de aplicaciones de terceros, en general sigue exigiendo que las aplicaciones utilicen su sistema de facturación.

Estos monopolios efectivos sobre los pagos dentro de las aplicaciones pueden hacer que los usuarios paguen más por los mismos contenidos o servicios en los dispositivos móviles que en los ordenadores personales.

El gobierno japonés considera que este modelo consolida el dominio de las empresas en el mercado móvil. La legislación pretende obligarlas a permitir tiendas de aplicaciones y sistemas de pago de terceros siempre que sean seguros y protejan la privacidad del usuario.

Las empresas japonesas podrían gestionar tiendas de juegos dedicadas en dispositivos iOS, así como utilizar sistemas de pago con tasas más bajas de empresas fintech japonesas.

Según el Ministerio de Asuntos Internos y Comunicaciones, se prevé que el mercado japonés de aplicaciones para móviles crezca hasta los 29.200 millones de dólares en 2023, aproximadamente la mitad que en 2018.

Las disposiciones de la legislación propuesta relacionadas con las búsquedas prohibirían a los operadores de motores de búsqueda dar un trato preferente a sus propios servicios. Esto podría, por ejemplo, prohibir a Google poner siempre sus propias herramientas de reserva de vuelos o restaurantes en la parte superior de los resultados de búsqueda.

Los planes de Japón siguen la estela de medidas como la Ley de Mercados Digitales de la Unión Europea. Esta legislación, cuya plena aplicación está prevista para 2024, prohíbe a los “guardianes” favorecer sus propias herramientas en los resultados de búsqueda, y los infractores se enfrentan a multas de hasta el 10% de su facturación global del ejercicio fiscal anterior.

En Estados Unidos, la semana pasada se informó de que Google había aceptado pagar 700 millones de dólares en un caso antimonopolio relacionado con su tienda de aplicaciones.

Noticia: asia.nikkei.com